“Y bueno nos dejó la Aidéé”, expresó la vicemandataria de Nicaragua, Rosario Murillo, al referirse al paso de otro plano de vida este 23 de septiembre de esta destacada danzarina quien dejó un gran legado en el país por haber dado su vida a promover, resaltar y preservar las tradiciones nicaragüenses.
Rosario enfatizó que, la Maestra Haydée Palacios, estuvo “Meses de estar acompañando a su familia en los tiempos más duros de sus dolencias que fue de años, pero una fuerza que tenía la Aidée que la tenemos que tener todos frente a la adversidad, siempre fortalezas, fuerzas, al mal tiempo buena cara, decimos popularmente”.
“La maestra Aidée Palacios oriunda de Masaya cuanto recorrimos Masaya, y Alejandro ella que ahora nos deja y cuanto reconocemos el aporte de cada uno y el aporte de la Aidée como mujer dedicada al arte al folklor a la enseñanza de la excelencia artística”, manifestó Rosario.
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Rosario, dijo que a esta gran mujer dedicada a la enseñanza artística “De verdad solo tenemos que rendirle todos los sombreros, todos los sombreros a la maestra Aidée Palacios que al dejarnos nos hereda un patrimonio invaluable tanto luchó por preservar las muestras los signos las señales más pequeñas, pero no por eso menos importante de nuestras tradiciones de nuestro folklor”.
Rosario señaló que a través de ella y Alejandro conocieron a Doña Carmen Toribio “Nos llevó a su casa a ver a la folklorista por excelencia a Doña Carmen Toribio abuela de Martha Toribio que sigue esa tradición”.
“Nos despedimos a la Aidée con lágrimas en el rostro honor a quien lo merece”, reiteró Murillo.
La vida de Aidée fue una vida “Recopilando, recogiendo, reinstalando tradiciones danzarías, cuidando todos los aspectos de nuestro folklor, fue de verdad guardadora, portadora de nuestras tradiciones”, aseguró.
Rosario finalizó que Aidée recibió la Orden de la Independencia Cultural de Rubén Darío en el año 1990 y “Que decir, que más decir, cuanto la hemos querido, cuanto la hemos apreciado, reconocemos suma magistral y sencillo, porque esa es también la clave magistral y sencillo, una persona sencilla sin ínfulas, una persona pueblo puro y una persona consiente de que su aporte en su vida milagro era resguardar y portar las tradiciones, restaurar las incorporación de las tradiciones más excelsas de la danza nicaragüense”.
¡Aidée, te queremos mucho!
