La investigación sobre los seis sobres con explosivos enviados en la última semana al presidente del Gobierno de España y a otras instituciones del país arroja que cuatro de ellos contenían textos escritos con la misma grafía, según recoge La Sexta de fuentes policiales.
Los paquetes con material susceptible de producir una deflagración fueron enviados a Pedro Sánchez, a la ministra de Defensa, Margarita Robles, al Ministerio de Defensa, a las embajadas de Ucrania y de EE.UU. y a una empresa armamentística sita en Zaragoza. El primero llegó el pasado 24 de noviembre y los otros cinco, que fueron franqueados el mismo día, llegaron entre el 30 de noviembre y el 1 de diciembre.
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Los hechos están siendo investigados como terrorismo por la Audiencia Nacional. Si bien todavía quedan muchas incógnitas por resolver, se especula con que su procedencia sería el propio territorio español y que detrás de los envíos podría estar un único autor, aunque por el momento no se desecha ninguna hipótesis.
La Policía descarta que los responsables de las acciones sean un grupo terrorista organizado o los servicios secretos rusos. Por su parte, el Secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, sostuvo este jueves en rueda de prensa que se excluye elevar el nivel de alerta terrorista porque estos eventos «no tienen entidad como para ello», aunque se ha reforzado la seguridad en instalaciones administrativas y diplomáticas, entre otras.
