Fuertes lluvias, deja al menos 40 personas sepultadas y miles de damnificados en Arequipa, al ocasionar un río de piedra y lodo.
Según medios locales, el saldo de estos deslaves, conocidos en Perú como huaicos, incluye también 20 heridos, dos desaparecidos y unas 12.000 personas damnificadas, según datos del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) y el gobierno regional de Arequipa.
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El gobernador Rohel Sánchez, explicó que el daño ha resultado magnificado en las localidades de Miski, Secocha, Urasqui y San Martín, que albergan explotaciones mineras, adonde llegan trabajadores de otras regiones, “que podrían haber muerto sepultados en los socavones que horadan los cerros de esta provincia”.
La zona más afectada es el distrito Nicolás Valcárcel, de la provincia de Camaná (oeste de Arequipa), donde las intensas lluvias que cayeron desde el domingo reblandecieron la materia de los cerros hasta provocar el aluvión.
Los deslaves en Nicolás Valcárcel produjeron también daños en 310 viviendas y destruyeron otras 10. Y afectaron además un establecimiento de salud y tres caminos rurales.
Sánchez advirtió que otras seis provincias arequipeñas están en emergencia por las lluvias propias de la temporada de verano y que todas han reportado daños materiales.
