Un grupo de científicos chinos, han concluido que el núcleo interno de la tierra, que consta de una bola caliente y densa de hierro sólido ubicada a más de 5 mil kilómetros de profundidad, podría haberse detenido y ha cambiado su rotación interna.
Las firmas de Xiaodong Song y Yi Yang, de la Universidad de Pekín, en China, analizaron las ondas sísmicas de terremotos casi idénticos que han penetrado el núcleo interno de la Tierra siguiendo trayectorias parecidas desde la década de 1960. Encontraron que desde el 2009 aproximadamente, las trayectorias que anteriormente manifestaban una variación temporal considerable han atravesado pocos cambios, lo que indicaría que la rotación del núcleo interno se frenó.
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De acuerdo a lo planteado esta variación se vincula con pequeñas modificaciones en algunos análisis geofísicos en la superficie terrestre, como el campo magnético o el incremento o la disminución de la duración de los días. Se trata del punto al que menos se puede acceder del planeta Tierra.
«Pensamos que el núcleo central está, respecto a la superficie de la Tierra, en rotación hacia una dirección y luego hacia la otra, como un columpio», señalaron los investigadores, que esperan con estos descubrimientos ayudar a profundizar la comprensión de cómo los procesos profundos de la Tierra repercuten en su superficie.
