Brendan Ferrao, un médico de 27 años originario de Mambai, India, quedó horrorizado al descubrir un inusual ingrediente en un helado de vainilla que pidió a través de una aplicación.
El médico, disfrutaba del frío postre, cuando sintió algo inusual en su lengua, por lo que de inmediato lo sacó eso de su boca, y descubrió que se trataba de un tozo de dedo humano.
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Lleno de asco e incredulidad, el doctor se apresuró a escupir el cremoso postre y olvidarse de su frío antojo para examinar la extremidad, que lucía aun con color, por lo que es probable que alguien lo haya perdido durante un accidente en la fábrica de helados.
El hombre sacó un par de fotografías del dedo, para tener evidencia y deslindar responsabilidades, mientras que su hermana procedió a llamar a la policía ante la sospecha de que la extremidad pudiera estar relacionada con algún delito.
El fabricante del producto fue puesto al tanto de la situación, mientras que el dedo fue enviado al laboratorio de ciencias forenses para una mayor investigación.
