Una pareja de adultos mayores demandaron ante las autoridades policiales de Bad Salzuflen, Alemania, a los dueños de un gallo que canta unas 200 veces al día, y no les permite descansar.
Friedrich-Wilhelm, de 76 años, y su esposa Jutta señalaron que no han tenido un día tranquilo en casa en mucho tiempo, todo por culpa de Magda, el gallo de sus vecinos.
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El ave doméstica, según denunciaron, comienza a cantar todos los días desde las 8 de la mañana y no para hasta la puesta del sol, cuando los dueños la encierran con una gallina.
Un hecho similar ocurrió en el año 2019 en Francia, cuando fue demandada Corine Fesseaun, debido a que su gallo Maurice cantaba mucho y desvelaba a sus vecinos.
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