La Corte Suprema de Estados Unidos ratificó que a partir del 19 de enero se prohíbe el uso de TikTok en el país a menos que la empresa matriz china ByteDance, decida venderla.
La decisión judicial deja en incertidumbre el futuro de la popular plataforma, que tiene 170 millones de usuarios en EE. UU.
El presidente Biden promulgó la ley, que el Congreso aprobó el año pasado y otorgó a ByteDance un plazo de nueve meses para desvincularse de las operaciones estadounidenses de la red social.
Por su parte la empresa demandó al gobierno estadounidense por dicha medida, y negaron que la plataforma sea utilizada como una amenaza a su seguridad nacional.
ByteDance ha declarado reiteradas ocasiones que no planea vender su plataforma prefiriendo su cierre para todos los usuarios locales, incluidos aquellos que tienen la ‘app’ descargada e instalada en sus dispositivos.
“Las declaraciones emitidas hoy tanto por la Casa Blanca de [Joe Biden] como por el Departamento de Justicia no han proporcionado la claridad y la seguridad necesarias a los proveedores de servicios que son esenciales para mantener la disponibilidad de TikTok para más de 170 millones de estadounidenses”, público recientemente en su página web.
Varios usuarios de esta plataforma que habitan en Estados Unidos han realizado este sábado vídeos despidiéndose de sus seguidores.
Además han informado que estarán creando contenido en otras plataformas, como Facebook e Instagram.
Por su parte, el Presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, manifestó que tomará una decisión sobre el futuro de la red social TikTok “en un futuro no muy lejano”.