James Farthing, un estadounidense del Kentucky, compró un boleto de Powerball en Georgetown por dos dólares y se llevó el premio mayor de 167 millones de dólares, el más grande en la historia del estado.
Sin embargo, solo unos días después, terminó en una cárcel de Florida, por agredir a un oficial de policía en un hotel.
Podría haber sido la semana más afortunada de su vida, pero no tuvo un final feliz
Farthing posó sonriente con el cheque gigante que simbolizaba su nueva fortuna. Pero su suerte cambió drásticamente.
El incidente ocurrió en el TradeWinds Island Grand Resort, un destino frente a la playa donde, Farthing y su novia, Jacqueline Fightmaster, de 42 años, estaban celebrando el premio de lotería que le cambió la vida.
La policía fue llamada por un altercado entre Farthing y una mujer. La víctima asegura que el acusado le propinó un puñetazo y el hombre -que estaba borracho luego se resistió al arresto, incluso llegó a patear al oficial en la cara.
