El Ministerio de Defensa de Rusia informó este domingo que sus Fuerzas Armadas atacaron instalaciones del complejo militar-industrial y de transporte de Ucrania, así como lugares de montaje, almacenamiento y lanzamiento de drones de largo alcance utilizados por las fuerzas ucranianas.
En la ofensiva, que incluyó aviación operativa y táctica, drones de combate, misiles y artillería, las fuerzas atacantes destruyeron depósitos de armas y equipo militar, aeródromos, dos estaciones de radar antiaéreo y puntos de despliegue temporal de tropas ucranianas y mercenarios extranjeros en 149 zonas.
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Según Moscú, la defensa antiaérea rusa derribó tres bombas aéreas guiadas, tres proyectiles del sistema estadounidense HIMARS y 210 drones.
Más tarde, el ministerio precisó que los ataques se extendieron a bases aéreas en el centro, sur y este de Ucrania, así como a la empresa industrial Kiev-67 y la base logística STS-GRUPP en las afueras de la capital ucraniana.