El presidente de Rusia, Vladímir Putin, en una reunión en la que recibió las cartas credenciales de 28 nuevos embajadores, destacó que su país quiere evitar que escale el conflicto palestino-israelí.
“Rusia está haciendo esfuerzos activos para evitar que la actual escalada del conflicto palestino-israelí desemboque en una gran guerra en el Oriente Medio”, señaló Putin, dirigiéndose a la embajadora de Israel en el país, Simona Halperin.
El mandatario de Rusia, afirmó que solo sobre una base jurídica internacional, generalmente reconocida, es posible devolver a las partes a la senda de la reconciliación y lograr una solución sostenible y duradera.
“La condición clave para restaurar la paz en la región es la implementación de la ‘fórmula de dos Estados’, aprobada por resoluciones del Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU”, enfatizó el mandatario ruso.
En la reunión donde el presidente de Rusia afirmó que Moscú actúa intensamente para evitar que el conflicto palestino-israelí se convierta en hostilidades amplias en la región, participaron diplomáticos de Japón, Canadá, Malta, Albania, Nueva Zelanda, Italia, España, Irlanda, Dinamarca, Bélgica, Países Bajos, Finlandia, Israel, Myanmar, Burkina Faso, Malasia, Bosnia y Herzegovina, India, Argentina, Kenia, Laos, Etiopía, Níger, Zimbabue, Bielorrusia, Kirguistán, Armenia y Azerbaiyán.