Una nueva oleada de ataques armados atribuidos a una coalición integrada por el Movimiento 23 de Marzo, la Alianza Río Congo y las Fuerzas de Defensa de Ruanda, ha sido denunciada por las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo.
Mediante un comunicado, el portavoz de las Fuerzas Armadas, Nestor Mavudisa Kamba Mayoyo, repudió estos ataques, calificándolos como “acciones criminales” que buscan sabotear los esfuerzos de pacificación en curso.

Agrega que, los asaltos se concentraron en varias posiciones estratégicas del ejército en la región de Kalehe, en el este del país, una zona golpeada por la violencia recurrente.
La coalición lanzó ofensivas simultáneas en las localidades de Kamatembe y Kalao, dentro del grupo de Mubuku, el 12 de julio, y posteriormente extendieron los enfrentamientos a la zona de Kashihe el 14 de julio.

Se informó que la madrugada del lunes se registraron combates intensos en Mwendabandu, en la provincia de Kivu del Norte, que se prolongaron durante horas, mientras que otra incursión armada se reportó cerca de Batanga, en Kivu del Sur.
El Ejército congoleño advirtió que estos actos violentos constituyen una violación deliberada del alto al fuego acordado y representan un intento de dinamitar los acuerdos de paz recientemente suscritos entre RDC y Ruanda en Washington.