Aunque parezca increíble, es cierto, los presos de una cárcel en Francia recibieron masajes faciales gratuito con motivo del día de San Valentín, el pasado 14 de febrero.
Además, esto no para ahí, los presos disfrutaron anteriormente de bailes campestres y estaría planeado que participaran en talleres de yoga en las próximas semanas.
Estos recientes beneficios de las que gozan no están siendo del agrado del entorno penitenciario, principalmente a la luz de los problemas de presupuesto que, según ellos, sufren los guardias.
“¡No, no están soñando! Todo esto pagado con nuestros impuestos”, denunció un día antes en un comunicado el sindicato local de guardias penitenciarios del centro de detención preventiva de Seysses, cerca de Toulouse.
Por lo que rechazan este tipo de actividades y piden a las autoridades pensar más en el personal del presidio y no en los privados de libertad.
“Me parece chocante que un violador, un secuestrador, pueda beneficiarse de eso. Se les castiga por actos graves, ¡hay que pensar también en las víctimas!”, afirmó recientemente Jérome Combelle, secretario del sindicato.
Para impedir que creciera, someten a su hija a dieta extrema
El ministro de Justicia francés, Gérald Darmanin, se pronunció este lunes respecto a la polémica y aseguró sentirse “conmocionado profundamente”.
Según explicó, se trata de “servicios prestados por colaboradores externos, de forma gratuita”, organizados antes de su llegada al cargo.
En este sentido, criticó a sus predecesores de “ciertos hábitos” que él pretende detener.
