Un preso del Complejo Penitenciario “Francisco de Oliveira Conde”, en Río Branco (Brasil), protagonizó un intento de fuga tan torpe como insólito: quedó atascado en el túnel que él mismo cavó en la pared de su celda.
Alan Leandro da Silva pasó dos días escarbando con un clavo y un palo de escoba, pero la madrugada del lunes su “plan maestro” terminó cuando su cuerpo no pudo pasar por el agujero.

“Estuve muerto 45 minutos y vi mi propia muerte”, dijo tiktokero
El recluso, vestido solo con un pantalón corto y descalzo, llamó la atención de los guardias, que lo encontraron tras notar movimientos extraños.
Al ver que estaba encajado sin posibilidad de avanzar ni retroceder, solicitaron la ayuda del cuerpo de Bomberos, que lo liberó usando un martillo neumático para evitar lesiones.

Preso se escapa por un agujero en el piso de la patrulla policial
El propio Alan confesó haber cavado el túnel con la esperanza de escapar, sin imaginar que su fuga terminaría con una humillante extracción a mitad de camino.
Las autoridades lo trasladaron para una revisión médica y lo regresaron a prisión al día siguiente, aparentemente ileso.
Pero la calma duró poco: apenas tres días después, otros nueve internos lograron fugarse con éxito del mismo penal. Esta vez, sin atascos ni rescates. Hasta ahora, las autoridades no han recapturado a ninguno.