Un proyecto de ley que aprobó el Parlamento de Corea del Sur, exige que el presidente de ese país, Yoon Suk-yeol, sea investigado por traición.
Un fiscal especial permanente investigará los cargos de insurrección contra el presidente y otros oficiales involucrados en la breve imposición de la ley marcial el pasado 3 de diciembre, así lo exige el proyecto.
‘Solicitud de investigación del fiscal especial para descubrir la verdad sobre la rebelión mediante la declaración de la ley marcial inconstitucional’, se llama la iniciativa de Corea del Sur.
La Asamblea Nacional la aprobó con 210 votos a favor, 63 en contra y 14 abstenciones.

El exministro de Defensa Kim Yong-hyun, recientemente detenido, y el jefe del Estado Mayor del Ejército, el general Park An-su, también están en la lista de investigados.
Así como el primer ministro surcoreano, Han Duck-soo, el comandante de contrainteligencia, Yeo In-hyung, y el exlíder parlamentario del gobernante Partido del Poder del Pueblo, Choo Kyung-ho.
El presidente no puede ejercer el derecho a veto contra un proyecto de ley sobre un fiscal especial permanente, a diferencia de una investigación de un fiscal especial regular, pero puede retrasar su nombramiento.
Considerándolo sospechoso de traición, rebelión y abuso de poder, el Ministerio de Justicia surcoreano impuso la prohibición de viajar para el presidente.
Además, la Policía no descarta la detención del mandatario. Las autoridades han puesto en marcha un equipo especial de unos 150 investigadores para encargarse del caso.