The Scratcher Girls o “Las Chicas Rascadoras” ofrece servicios profesionales como terapia de relajación. Con uñas de 7,5 centímetros especialmente preparadas, estas terapeutas cobran hasta 130 dólares por hora para rascar espaldas.
Su fundadora Toni George de 55 años, dijo que la idea surgió de su propia experiencia.
“Desde niña me apasionaba que me rasquen la espalda. Llegué a pagarle a mis hijos por hacerlo y hasta hoy les pago a mis nietos”, precisó.
Narró que una noche, mientras dormía, tuvo la revelación de que otras personas podrían estar dispuestas a pagar por este servicio, como ella lo hacía. Después de investigar el mercado, creó The Scratcher Girls.

Abandona su profesión para brindar sus servicios de “abrazos a desconocidos”
Su servicio consiste en deslizar las uñas por la espalda, las extremidades, el cuero cabelludo e incluso el interior de las orejas del cliente, estos movimientos suaves provocan la liberación de endorfinas como la serotonina y ayudan a “conectar y balancear los campos energéticos” del cuerpo.
Actualmente viajan regularmente a grandes ciudades como Nueva York, Los Ángeles y Filadelfia para atender a sus clientes.
Esta iniciativa se suma a otros negocios inusuales como alquiler de personas con sobrepeso por hora, los abrazadores profesionales y los calentadores humanos de camas.