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Rossy Puente, es una joven de Nuevo León, México, que al descubrir la infidelidad de su pareja canceló su boda programada para el 3 de agosto, y para recuperar el dinero que invirtió organizó una fiesta de pago por acceso
“¡Hola! El sábado 3 de agosto de este año iba a casarme, pero por motivos personales decidí cancelar la boda. Los preparativos ya iban muy avanzados y el salón ya está liquidado, por lo que necesito recuperar una parte de lo que gasté entre el salón y proveedores. Así es que decidí hacer una fiesta de NO BODA. ¡Los invito a divertirnos, bailar, comer y beber! Espero contar con el apoyo de gente chida y, si tienes algún amigo que se quiera divertir, invítalo también”, publicó en sus redes sociales.
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La fiesta se realizará el mismo día que estaba prevista su boda, y para la cual vendió boletos a 750 pesos, los cuales se agotaron rápidamente. En esta fiesta los asistentes tendrán un menú a cuatro tiempos, barra libre de bebidas y la participación del grupo musical Campos Banda.
“Infinitamente agradecida con cada uno de ustedes. Muchas gracias por su apoyo. Nos vamos a divertir muchísimo”, publicó después en su red social de Facebook.