En la comunidad francesa de Bissy-sur-Fley, en el departamento de Saona y Loria, una mujer murió asfixiada por la ventanilla de su propio coche al quedarse atrapada mientras estaba limpiando el vehículo.
La tragedia ocurrió cuando Bernadette Delmotte, de 65 años, intentó frenar su Fiat 500 rojo, que repentinamente había empezado a rodar hacia atrás.
Ese día, a la mujer la esperaban unas amistades para una comida. Cuando no se presentó, intentaron llamarle varias veces. Preocupados porque no contestaba, decidieron ir a su casa, donde les esperaba una escena macabra: el cuerpo sin vida estaba colgando del auto con la cabeza atrapada por la ventanilla.
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François Delmotte, hermano de la mujer relató que “En un principio, incluso los gendarmes estaban perdidos”.
“Se preguntaban: ‘¿qué demonios pasó?’. Yo tampoco lo entendía”, agregó. Cuando supo de la tragedia, no se podía creer lo que había pasado y pensó en todo tipo de escenarios: que la habían atacado, que se había suicidado, que le había dado un infarto o que alguien le había hecho daño intentando robarle el coche.
