Tras la caída de un autobús donde viajaban peregrinos hindúes, al menos diez murieron y más de 50 resultaron heridos, este hecho ocurrió en el norte de la India.
Este inició el trayecto desde la ciudad de Amritsar, en el estado norteño de Punjab, y se dirigía a uno de los santuarios hindúes más populares del país, dedicado a una deidad, Vaishno Devi.
En el momento que ocurrió el hecho el autobús viajaba por un desfiladero ubicado en la Cachemira administrada por ese país.
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De acuerdo con el jefe del distrito policial, Chandal Kohli, el ómnibus se salió de la carretera y rodó por un profundo peñasco.
Kohli confirmó que ocho de los pasajeros fallecieron en el acto y dos en el hospital. En el lugar se encontraban rescatistas y vecinos de la zona ayudando a los damnificados.
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Hasta el momento las autoridades no han determinado las causas del accidente, «parece que el conductor se había quedado dormido», tras pasar toda la noche al volante, dijo el policía de Cachemira, Dilbag Singh.
