Durante la visita del ministro chino Wang Yi, a la cancillería de Rusia, donde se reunió con el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, se plantearon temas como las perspectivas de aplicación de la iniciativa iniciada por la parte rusa de crear una nueva arquitectura de seguridad en Eurasia en un contexto de «estancamiento de los mecanismos euroatlánticos».
Además, discutieron la cooperación en el seno de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, según sus siglas en inglés) en el contexto de la intensificación de las actividades de algunos países para establecer «mecanismos político-militares de bloque estrecho destinados a socavar el sistema centrado en la ASEAN de mantenimiento de la seguridad y la estabilidad» en la región.
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También hablaron sobre la importancia de reforzar la coordinación de la política exterior entre Moscú y Pekín en diversas plataformas internacionales, como la Organización de las Naciones Unidas, la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS, según sus siglas en inglés), la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés), el G20 y otros formatos.
«El vínculo Rusia-China está trabajando para formar un orden mundial más justo y multipolar, promoviendo los principios de un auténtico multilateralismo y aportando energía positiva tanto a la ONU como al G20», dijo el diplomático ruso.
