La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova expresó que su país condena el ataque masivo contra bíperes en el Líbano y lo califica como «otro acto de guerra híbrida» que afectó a miles de ciudadanos».
Pidió una investigación exhaustiva de este crimen para que «otro acto de terrorismo no sea barrido bajo la alfombra».
«Condenamos enérgicamente el ataque sin precedentes contra el país amigo del Líbano y sus ciudadanos, que constituye una grave violación de su soberanía y un gran desafío al derecho internacional con el uso de armas no convencionales», agregó Zajárova.
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Precisó que Moscú hace un llamamiento a «todas las partes implicadas» en Oriente Medio para que actúen con moderación y se nieguen a dar pasos que puedan llevar a una mayor escalada de la situación en la región.
La alta funcionaria rusa dijo que las crecientes tensiones a lo largo de la frontera entre el Líbano e Israel, tales acciones irresponsables podrían tener consecuencias extremadamente peligrosas al provocar una nueva ronda de escalada.
«Esto requiere una investigación, requiere la atención internacional sobre este tema. Esto debe ser calificado por especialistas, pero todo debe ser investigado», añadió Zajárova.
