Al menos 600 personas de Israel han muerto y más de 2.000 resultaron heridas, incluyendo a 20 en estado crítico y más de 300 graves, tras los enfrentamientos con Hamás, según los últimos informes de los medios de comunicación israelíes.
Mientras que, el Ministerio de Sanidad palestino en Gaza ha informado que al menos 313 personas murieron y casi 2.000 han resultado heridas hasta ahora por los ataques israelíes.
«La guerra es difícil, nos esperan días desafiantes«, afirmó este domingo el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel, Daniel Hagari.
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El sábado por la mañana, decenas de combatientes palestinos atacaron bases israelíes en la región, tomando por sorpresa al aparato de seguridad israelí. Los militantes de la resistencia tomaron cautivos a 35 soldados israelíes, según las primeras cifras.
El líder de la resistencia de Hamas, Mohammed Deif, anunció el inicio de lo que denominó “Operación Diluvio de Al Aqsa”.
