Dentro de una cisterna subterránea en un campo de maíz cerca de la ciudad de Austin, en Texas, tres personas y un perro fueron encontrados muertos.
La oficina del condado de Bastrop y los socorristas llegaron al lugar de los hechos tras atender un llamado de un testigo que avisó de que tres individuos habían quedado atrapados en un agujero al nivel del suelo.
El agujero era en realidad una cisterna subterránea que estaba parcialmente llena de agua. El incidente tuvo lugar en la madrugada de este miércoles, cuando una de las tres personas probablemente entró a la estructura para intentar rescatar a su perro de caza, que había caído en el lugar.
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El alguacil del condado, Maurice Cook, señaló que en el caso de los otros dos fallecidos, se cree que ingresaron a la cisterna en un intento de rescatar a la primera persona que había caído. Mientras que el cuarto miembro del grupo fue a pedir ayuda a los servicios de emergencia.
Las tres personas y el perro murieron ahogados al no poder mantenerse a flote debido a las altas concentraciones de sulfuro de hidrógeno, un gas tóxico común en pozos y fosas sépticas que hace disminuir las propiedades de flotación del agua.
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