Aproximadamente 146 hectáreas de terreno registradas en Quito-Ecuador han sido destruidas por los voraces incendios que se desataron el pasado martes, por lo que se declaró a esa ciudad en emergencia, indicó el alcalde de la capital ecuatoriana, Pavel Muñoz.
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Se informó que quedaban algunos focos por extinguir. Aunque la calidad del aire se ha ido recuperando progresivamente, la Secretaría de Ambiente de Quito instó a la población a usar mascarillas y a mantenerse hidratada.
La Secretaría del Ambiente aún estudia el impacto que causaron las llamas, que presuntamente habrían sido provocadas en 99 por ciento, sin embargo, ha advertido que posiblemente lleve entre una década y cien años la recuperación del bosque natural que fue devastado, informó la prensa local.
