En el Puerto Santa Marta, Colombia, agentes policiales incautaron 1,7 toneladas de cocaína escondidas en un cargamento de aguacates.
Esta estrategia utilizada por traficantes para intentar eludir los controles. Se presume que esta droga pertenecía al Clan del Golfo.
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El director de la Policía Nacional de Colombia, el general William René Salamanca Ramírez, destacó que el destino final de la carga era la ciudad portuguesa de Setúbal.
Por su parte, el Ministro de Defensa de Colombia, Iván Velásquez Gómez, comunicó que un total de 1.696,8 kilos de clorhidrato de cocaína confiscó la Dirección Antinarcóticos de la Policía colombiana.
