Un tiroteo en una escuela en las afueras de la capital de Finlandia, dejó un niño fallecido y dos gravemente herido.
Tras el tiroteo, la policía acordonó un edificio de la escuela Viertola en el suburbio de Vantaa en Helsinki, y detuvo a un estudiante de 12 años como sospechoso del ataque.
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El sospechoso y el arma están ahora bajo custodia policial. Sin embargo, no se ha proporcionado mayores detalles sobre la identidad de las víctimas y el atacante, solamente se conocen que todos son alumnos de la escuela.
La ministra de Educación, Anna-Maja Henriksson, lloró al indicar que “Un niño de 12 años nunca volverá a casa desde la escuela».
El sospechoso había admitido el ataque en una entrevista preliminar, dijo la policía, y los delitos serían investigados como asesinato e intento de asesinato.
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