Este miércoles, Estados Unidos activó aranceles adicionales del 25 por ciento a los productos de India, debido a su compra de crudo ruso, estos se añaden a otros ya aplicados el 7 de agosto con la misma tasa, lo que asciende a 50 por ciento el total sobre importaciones de ese país.
De esta manera Estados Unidos, pretende penalizar a India por comprar petróleo ruso. El Gobierno indio defiende esta política alegando motivos de seguridad energética y control de la inflación.
Los aranceles se aplican a áreas esenciales para ejercer presión económica y social, como las gemas, el textil o los mariscos, mientras que se eximen a otros productos de interés para Estados Unidos, como la electrónica y los productos farmacéuticos.
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Washington utiliza la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional, que es una herramienta de seguridad nacional, para establecer su política arancelaria. Según sus argumentos, el hecho de que India compre petróleo ruso representa un peligro para la seguridad estadounidense.
La semana pasada, Rusia, manifestó que estaba dispuesta a proporcionar una alternativa para las exportaciones de India si los aranceles de Estados Unidos perjudicaban esas exportaciones, en un esfuerzo por reducir el impacto de las sanciones.
