El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha decretado siete días de luto por el fallecimiento del papa Francisco.
“Con su sencillez, coraje y empatía, Francisco llevó el tema del cambio climático al Vaticano. Criticó vigorosamente los modelos económicos que llevaron a la humanidad a producir tantas injusticias”, dijo el presidente de Brasil.
Destacó que siempre estuvo al lado de quienes más lo necesitan: los pobres, los refugiados, los jóvenes, los ancianos y las víctimas de la guerra y de toda forma de prejuicio.
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Mientras que el Gobierno de España ha declarado tres días de luto oficial. Y enviaron sus más sentidas condolencias a toda la comunidad católica.
Desde el Vaticano señalaron que la canonización prevista para el domingo del primer ‘santo milenial’ de la Iglesia católica, Carlo Acutis, ha sido aplazada tras la muerte del papa Francisco.
Y las campanas de la catedral de Notre Dame de París repicaron como un homenaje al papa Francisco.
Varios mandatarios han expresado su profundo pesar por la partida física del papa Francisco.
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Entre ellos el presidente de Venezuela, quien destacó que el pontífice “fue un líder espiritual transformador, cuya voz clara y valiente denunció las desigualdades del sistema dominante y llamó a construir un mundo más humano, más justo y profundamente solidario”.
Además, la presidenta de México, los presidentes de Rusia, Estados Unidos, Cuba, Argentina, Moscú, entre otros.
