Un ataúd y el cadáver de un hombre fueron robados de un cementerio en Chovet, una localidad cercana a Venado Tuerto en Santa Fe, Argentina.
El hecho fue descubierto por la viuda e hijo del fallecido, quienes llegaron al Campo Santo a dejar flores y descubrieron que la cripta había sido profanada.
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El robo ha desatado una serie de acusaciones entre los hijos del fallecido, ya que uno de ellos de nombre Silvio señala a su hermano Sergio de haber robado el sarcófago y el cadáver de su padre.
Mientras que los habitantes de Chovet creen que el ataúd fue sustraído para saquear joyas y oro que podría contener. Otros rumores sugieren que había dinero y documentos de propiedades en su interior. También se ha especulado que el objetivo del robo podría ser la realización de una prueba de ADN al cadáver del fallecido.
En medio de esta confusión, Silvio y su madre Olga, han ofrecido una recompensa a quien proporcione información que conduzca a la recuperación del ataúd y el cadáver.
