Un grupo de personas que se hacen llamar “Las Hermanas del Valle” pero que no pertenecen a ninguna congregación religiosa, se han vuelto virales porque difunden el evangelio de los poderes curativos de la marihuana.
Este grupo de “hermanas” llevan este hábito y viven en una comunidad a las afueras de un pueblo del centro de México y se hacen llamar monjas.
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Desde el año 2014, elaboran productos medicinales a partir de la planta de la marihuana. En Estados Unidos, donde una veintena de estados han legalizado la marihuana recreativa, el grupo vende esos productos y recauda cientos de miles de dólares al año. También imparte talleres y asiste a eventos relacionados con el cannabis.
«Queremos recuperar el cultivo de los narcos», aseguró la ‘Hermana Bernardet‘. En México, gran parte de la producción de cannabis está vinculada a organizaciones criminales, y las Hermanas del Valle están preocupadas porque los narcotraficantes puedan amenazarlas o extorsionarlas.
