Un cirujano fue despedido de su trabajo en Alemania después de que le pidiera a una conserje que sostuviera la pierna de un paciente mientras le amputaba un dedo del pie.
Este hecho aconteció en el hospital universitario de Mainz. Antes del incidente, se había programado que el paciente se sometiera a una amputación de rutina del dedo del pie y dos cirujanos debían realizar la operación.
Los cirujanos fueron llamados a la sala de emergencias por otro incidente, un tercero intervino para realizar el procedimiento, a pesar de que no había asistentes cualificados.
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A pesar de esto el cirujano siguió adelante con la operación antes de que el paciente parcialmente anestesiado se sintiera inquieto. Cuando el paciente comenzó a moverse en la mesa de operaciones, el cirujano llamó a una conserje y le pidió que sujetara la pierna del paciente.
