Una mujer que sospechaba de la infidelidad de su esposo con el que tenía 18 años de casados, decidió colocar laxante en la comida que llevaba como almuerzo, debido a que la compartía con la amante.
La mujer se encargaba de prepararle el almuerzo al esposo, por lo que colocó el laxante en unos chilaquiles para que ambos fueran directo al baño y quedaran al descubierto.
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A través de una especie de “story time” la mujer reveló que tras sospechar que su esposo le era infiel decidió colocar el laxante en la comida y así confirmar la traición.
Agregó que fue de esta manera en que descubrió la traición, ya que la pareja terminó en el baño de la oficina.
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