En un juzgado de Ibagué, una mujer de la capital del Tolima presentó una demanda en la que alega ser víctima de espionaje por parte del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y la vicepresidenta Kamala Harris, al recibir la vacuna contra la COVID 19.
La demandante asegura que con la aplicación de la vacuna contra el COVID-19 le implantaron un dispositivo con tecnología de inteligencia artificial, el cual monitorea sus movimientos y actividades de manera constante.
La mujer, reclama que este supuesto dispositivo ha violado su derecho a la privacidad, por lo cual pide una compensación de 50 millones de dólares.
Dijo tener pruebas físicas de la presencia de este objeto en su cuerpo y menciona que estas evidencias se logran a través de un “examen de espionaje” que confirmaría su denuncia.
“Hechos: implantación de objeto extraño en el cuerpo con tecnología de inteligencia artificial. Tengo una prueba en mi cuerpo que demostraré con un examen de espionaje”, dijo
“Demanda en contra del presidente de Estados Unidos y la vicepresidenta (…) demanda en la cuantía por valor de 50 millones de dólares libres de impuestos”, según la denuncia
El caso causa sorpresa en los círculos judiciales y mediáticos del país, por el tipo de acusación y por la magnitud de las exigencias de la demandante.