Autoridades de China presentaron una protesta ante la Unión Europea, por permitir que separatistas independentistas taiwaneses como Hsiao Bi-khim, ingresaran al edificio del Parlamento.
Esto para reunirse con las autoridades comunitarias y llevaran a cabo allí sus actividades independentistas.
Consideraron que esta visita perjudica gravemente los intereses fundamentales viola gravemente el principio de una sola China.
Agregaron que interfiere gravemente en los asuntos internos del país y socava la confianza política entre Pekín y el bloque.
La Asociación Interparlamentaria para China, cuyas actividades van en contra de los intereses de Pekín y la integridad territorial del gigante asiático, realizó en el recinto del Europarlamento su reunión anual.
