Bielorrusia a través de su primer vicejefe de la aviación de la Fuerza Aérea Andréi Rachkov, denunció una intensa actividad aérea de la OTAN a lo largo de las fronteras nacionales.
Lo anterior lo manifestó, durante una entrevista concedida al canal VoyenTV, donde el militar calificó la situación de “muy complicada” para el control del espacio aéreo para Bielorrusia.
Para monitorear el espacio aéreo de la república eslava, los países de la Alianza Atlántica emplean “todo el arsenal de la aviación de inteligencia”.
Diariamente se registran de 6 a 8 despegues que pueden aumentar hasta 12, sobre el territorio colindante, incluidos los vuelos en grupo de la aviación táctica que parten de aeródromos de Polonia y los Estados bálticos.
Asimismo, se detectan, múltiples vuelos de avionetas, helicópteros y drones a lo largo de la frontera bielorrusa, agregó Rachkov.