A 232 asciende el número de víctimas mortales del derrumbe del techo de la discoteca Jet Set en Santo Domingo, República Dominicana, días atrás.
Esta cifra se reporta con la muerte de una persona quien estaba ingresada en un centro hospitalario, así lo informó Servicio Nacional de Salud dominicano (SNS).
El comunicado indica que se trata de un paciente de 46 años que estaba en la Unidad de Cuidados Intensivos de un hospital traumatológico en Santo Domingo.
En el local murieron 221 personas de forma instantánea, según las autoridades, mientras que otras 11 han fallecido en los hospitales donde se trasladaron. El accidente dejó otras 180 personas heridas.

Investigaciones intentan esclarecer lo sucedido en Jet Set, una a cargo de la Procuraduría General de la República.
La otra de carácter técnico que adelanta la Oficina Nacional de Evaluación Sísmica y Vulnerabilidad de Infraestructura y Edificaciones (Onesvie).
Sobre esta tragedia, el presidente dominicano, Luis Abiner, afirma que se debe dar respuesta a “qué pasó, por qué pasó y cómo pasó” en la popular discoteca, propiedad de Antonio Espaillat, quien se ha puesto a disposición de la justicia.
“Con el más alto sentido de respeto institucional y humano, nos dirigimos a usted en nombre de la entidad jurídica Inversiones E Y L, propietaria del establecimiento comercial conocido como Jet Set”.
” Con el propósito de manifestar formal y expresamente nuestra entera disposición de colaborar con la Procuraduría Fiscal del Distrito Nacional”, indicó Espaillat en una carta remitida al Ministerio Público y conocida el martes pasado.
Entre la población dominicana, consternada por el siniestro, proliferan las voces que hablan de negligencia y piden justicia.
Ya se han presentado las primeras demandas contra los propietarios del local, las cuales involucran también al Estado dominicano y la Alcaldía de la capital por presunta responsabilidad civil.