El árbol de Navidad de una localidad alemana, apodado como el más feo, debido a su estructura torcida.
Y por sus escasos adornos, por lo cual es motivo de burla y la situación parecía ser un tanto incómoda tanto para los habitantes como para las autoridades locales en esta Navidad.
Ahora lo que parecía ser un punto negativo en Navidad para el pueblo se convirtió en una curiosidad que ha captado la atención de los medios.
Pero asombrosamente, también captó la atención de turistas que llegan para conocer el curioso árbol de Navidad.
Lejos de dejarse amedrentar por las críticas, los habitantes han decidido darle un giro positivo a la situación en Navidad.
La controversia alrededor del árbol ha ayudado a promocionar la localidad y como muestra de su peculiaridad, incluso se ha creado una canción dedicada al árbol.
Esto al final pone en evidencia cómo algo que, al principio parece negativo, se convierte en una herramienta de publicidad y atracción turística.
Pero además ha demostrado que la percepción de la belleza es, al final, subjetiva.
