Para adaptar a las realidades y necesidades actuales, ha sido aprobada la reforma de la Ley General de Migración y Extranjería de Nicaragua, y la adición a la Ley 641, Código Penal de la República por la Asamblea Nacional.
Reforzar los controles fronterizos y combatir delitos como el crimen organizado, tráfico ilícito de migrantes, trata de personas, explotación laboral, terrorismo, y otros actos que puedan amenazar la soberanía, independencia y paz de Nicaragua, es el propósito de esta reforma.
La diputada Patricia Sánchez, de la Comisión de la Paz, Defensa, Gobernación y Derechos Humanos, destacó que esta reforma moderniza y actualiza el marco jurídico de la Dirección General de Migración y Extranjería.
“Para cumplir y hacer cumplir la Constitución Política de la República de Nicaragua y continuar fortaleciendo la soberanía, la seguridad y la paz en nuestro país”, resaltó.

Dichas modificaciones responden a los requerimientos de fortalecer el marco jurídico y adecuarla a los nuevos tiempos que permitan fortalecer los controles fronterizos a nivel nacional.
“Y garantizar la seguridad ciudadana, posicionando a nuestro país como uno de los países más seguros de la región y continuar siendo un referente de seguridad en América Latina”, enfatizó.
Algunos aspectos importantes es que se amplía el plazo de 72 horas a 7 días hábiles para circular de forma preventiva a los menores de edad, a solicitud de uno de los padres, cuando exista riesgo de intención de uno de ellos de llevárselo fuera del país sin el permiso correspondiente.