La región occidental de Xinkiang, China, fue sacudida por un sismo de magnitud 5.6 grados, a pocos días del terremoto de 7.1 grados que provocó grandes daños materiales y la muerte de tres personas.
El Centro de Redes Sismológicas del país asiático, informó que el movimiento telúrico se registró en el condado de Wushi, con el epicentro localizado a 18 kilómetros de profundidad, sin que de momento se haya informado de víctimas o daños a edificaciones.
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El 18 de diciembre, un temblor de 6.2 grados que afectó las provincias de Gansu y Qinghai, dejó 151 fallecidos, graves daños en infraestructuras socioeconómica y más de 200.000 viviendas destruidas.
Debido a que es una zona poco poblada, el número de víctimas es bajo a pesar de la fuerza del temblor.
