Siguiendo el llamamiento del clérigo chií iraquí Moqtada Al Sadr, para protestar por la quema del Corán, libro sagrado de los musulmanes, en una mezquita en Estocolmo, decenas de personas irrumpieron en el edificio de la embajada de Suecia en Bagdad.
Los manifestantes prendieron fuego a una bandera con los colores del arco iris que representa a la comunidad LGBT y muchos sostenían el Corán y retratos del clérigo populista chií iraquí Moqtada al-Sadr y coreaban “sí, sí al Corán”.
Sadr pidió la “salida del embajador” después de que Salwan Momika, un refugiado iraquí, quemara varias páginas del Corán el miércoles ante la mayor mezquita de Estocolmo. Antes de la irrupción, los manifestantes se congregaron frente a la embajada tras el llamado del líder chiita.
Mientras que el Ministerio de Exteriores de Irán convocó al embajador sueco en Teherán, en protesta por la quema de un ejemplar del Corán frente a una mezquita en la capital de Suecia, Estocolmo.