El conductor de un autobús en Argentina intentó frustrar un robo.
Cerró el paso a un par de delincuentes que acababan de robar en una verdulería en el barrio Los Ceibos, en Buenos Aires.
El autobús cubría una ruta en la localidad de González Catán.
El conductor observó a los delincuentes que huían a bordo de una motocicleta e intentó cerrarles el paso con su vehículo.
La maniobra del conductor inquietó a los ladrones, por lo que uno de ellos sacó una pistola y apuntó a los pasajeros que entraron en pánico y pidieron al busero que los dejara ir.
Los delincuentes lograron evadir la encerrona, poco después un grupo de vecinos los interceptaron y los sometieron a una golpiza antes de entregarlos a la Policía.
Uno de ellos tuvo que ser trasladado a un hospital a raíz de una conmoción cerebral.
Dentro del colectivo se generó una situación de tensión.
Los pasajeros le propinaron algunos golpes al conductor por poner en riesgo sus vidas al enfrentarse a los ladrones.
