El Presidente de la Federación de Rusia, Vladimir Putin ha negado que la caída de Bashar Asad en Siria, supone una derrota para Moscú y dio por cumplidos todos los objetivos que se había propuesto con la intervención militar en este país árabe.
“Ustedes quisieran presentar cuanto sucede en Siria como un fallo o una derrota de Rusia, pero le aseguro que no es así”, así respondió el Presidente ruso a un periodista del canal de televisión estadounidense NBC durante una rueda de prensa anual combinada con una línea directa con la ciudadanía.
Putin, recalcó que Moscú ha alcanzado su fin de prevenir la transformación de Siria, en un baluarte del terrorismo.
“Llegamos a Siria hace 10 años para impedir la creación de un enclave terrorista como el que observamos en otros países, por ejemplo, en Afganistán. En general, hemos logrado nuestros objetivos”, agregó el presidente de Rusia.
“La inmensa mayoría de ellos nos dicen que estarían interesados en que nuestras bases militares permanezcan en Siria. No lo sé, tendremos que pensarlo”, indicó el Presidente Vladimir Putin.