El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, pidió disculpas por la breve imposición de la ley marcial que tuvo lugar la noche del 3 de diciembre, una medida que fue revocada en cuestión de horas.
En un discurso dirigido a la nación, Yoon Suk explicó que la decisión fue tomada debido a un “sentido de urgencia” ante una situación crítica, pero reconoció que esta acción generó ansiedad y preocupación en la población.
“Lo siento mucho y pido disculpas sinceras a las personas que puedan haberse sorprendido. No eludiré la cuestión de la responsabilidad jurídica y política en relación con la declaración de la ley marcial”, expresó el mandatario, según reportes de la agencia Yonhap.
Dejaré a manos de mi partido estabilizar la situación política en el futuro, incluido mi mandato manifestó Yoon.
Además, Yoon garantizó que no se reinstaurará la ley marcial, a pesar de los rumores que circulaban sobre su posible reactivación.
Por otro lado, el líder del partido gobernante, Han Dong-hoon, sugirió que la destitución del presidente es casi inevitable, destacando que Yoon Suk-yeol ya no puede desempeñar sus funciones normales debido a la creciente presión política y social.
