Wanda Palmer, una mujer originaria de Estados Unidos, se mantuvo en coma durante 2 años y al despertar identificó a su hermano como su atacante.
La mujer de 51 años de edad, fue brutalmente atacada en su casa ubicada en Virginia y acusó a su hermano mayor, Daniel Palmer, como su agresor.
La policía encontró a Palmer en una “posición vertical” en su sofá dentro de su casa con graves heridas causadas por lo que parecía ser un arma de tipo hacha. Pero nunca lograron recuperar el arma utilizada en el ataque, según las autoridades.
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Inicialmente oficiales pensaron que la mujer había muerto, sin embargo notaron que tenía un pulso leve, por lo que fue remitida a urgencias inmediatamente, donde quedó en coma.
El sheriff del condado de Jackson, Ross Mellinger, contó que un testigo ubicó al hermano de la víctima, Daniel Palmer, en la vivienda de la mujer sobre la medianoche. Pero que no se pudo relacionar con el crimen, ya que no había registros telefónicos, imágenes de las cámaras de seguridad ni más testigos oculares.
